Amy regresó a la mansión bastante desanimada, al parecer los habitantes de aquel pequeño país del este ya estaban prevenidos contra ellos, por lo que el alimento escaseaba. La intensa luz de las farolas dañaba sus ojos casi como si de la luz del sol se tratase, estaba hambrienta....
- ¿Qué tal ha ido la noche? - preguntó Shadow desde el sofá
- Horrible... estoy harta de este país.... - suspiró ella
Amy, a pesar de tener más de 600 años, se había conservado con aquella apariencia de dulce muchacha de 18 años, su piel seguía rosada, aunque algo más pálida por la falta de alimento y aquellos ojos verdes seguían siendo el mejor cebo para sus víctimas. Shadow seguía a su lado, inseparable, cuidando de ella tal y como había prometido hacía años. Habían vivido muchas cosas juntos... visitado tantos lugares.... el sueño de ella hecho realidad...
Pero su sed de sangre escaseaba en aquel país tan tecnológico.... Amy abrió un par de botones de la parte inferior de su kimono rojo y se sentó encima de su compañero, besando su cuello con ternura para después abrazarle... A Shadow esto le resultaba tan excitante como el primer día y, simplemente, se dejó hacer...
- Shadow, dime una cosa... ¿Cuanto tiempo llevamos juntos? - soltó ella
- Hmmm más o menos seis siglos.. ¿Por qué?
- ¿No crees que es hora de volver a casa?
- ¿Quieres volvera Edhany? - preguntó algo sorprendido
- Si... Cuando llegamos me gustaba esto pero ahora.... no se, quiero algo más tranquilo... Aquí todos saben quienes somos
- Puede que tengas razón... Coge tus cosas, nos vamos - dijo con aquella inmaculada sonrisa
Amy le abrazó fuerte y le besó, acto seguido hizo sus maletas. Partieron aquella misma noche, no fue difícil encontrar quien les llevase.. pues Shadow se las ingenió para coaccionar a un piloto del ejército con amenazas de matar a su mujer y a sus dos hijas.. el perro, asustado accedió a llevarlos hasta Edhany, actual Green Hill.
Pese al paso de los años, no había cambiado mucho, Edhany, ahora llamado Green Hill seguía siendo aquel valle verde rodeado de montañas y con frondosos bosques, aunque su casa ya no estaba, el palacio había sido derruído en una de las guerras que asolaron el país y tan solo quedaban vestigios de lo que un día fue. Decidieron no quedarse allí, pues el pueblo era pequeño y había muy pocos habitantes, por lo que se fueron directos a Central City, una gran ciudad no muy lejana. En cuestión de unas pocas horas, Shadow ya había conseguido adquirir el ático del edificio más lujoso de la ciudad, por suerte, este tenía cristales tintados que no dejaban que la luz del sol entrase, por lo que no les haría daño.
- ¿Contenta? - preguntó el erizo negro
- Mucho, esto es realmente increíble, mucho mejor que Toyshika - dijo sonriente
- Gran ciudad, dos desconocidos, gente.... hmmmm que pena que ya esté amaneciendo
- Ahora vamos a dormir, me muero de ganas por verlo todo
martes, 23 de febrero de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Muy buena la entrada!! vampirosssssss Edward, Bella, Alice, mi Shadow....
Me gusta mucho tu bloggg porfa sige escribiendo!!!!!!!!!!!!!!
Muyy buenoo, muero por leer el sig. capiutulo ^^
Publicar un comentario